Desde la Fiscalía Especializada en Delitos de Alto Impacto se realizan actos procesales para la garantía del acceso a la justicia de los agraviados por el ejercicio de los hechos delictivos que acontecen en Aguascalientes; derivado de la celebración de una audiencia inicial luego del cumplimiento de una orden de aprehensión en contra de Eduardo N N, se estableció que se le inicie un proceso penal por el posible ejercicio de las conductas típicas de Privación Ilegal de la Libertad y Violación, por los que permanece en prisión en espera de la siguiente etapa de la causa que se  sigue en su contra.

En contextualización de los acontecimientos, la víctima y el imputado sostuvieron una relación de pareja; producto del vínculo nació un niño, sin embargo, la relación se fragmentó, dando pie a que ambas partes acordaran los términos para la convivencia con su hijo.

Es así como el día 27 de junio del año en curso, alrededor de las 18:30 horas, la mujer se dirigió a la vivienda del imputado, que se ubica en el fraccionamiento Rodolfo Landeros del municipio de Aguascalientes; lugar donde acordaron verse para que el sujeto le entregara al niño y fijar una nueva fecha de convivencia.

De pronto, el imputado comenzó una discusión, y molesto, caminó hasta el portón de acceso para cerrarlo con un candado, dejando atrapada a la fémina, restringiendo su libertad deambulatoria.

Al tener control de la situación, Eduardo insultó severamente a la mujer y amenazó con privarla de la vida; después la golpeó en la cabeza con el puño y tomó un cuchillo para amedrentarla, conduciéndola hasta el fondo de la vivienda, lugar donde se encuentra una habitación a la que la obligó a ingresar acompañada de su hijo.

Una vez en el dormitorio, la mujer le pidió permiso para ir al baño que se encuentra cercano a la cochera; ella acudió y al regresar el sujeto la llamó a la cocina; una vez ahí, le aventó agua hirviendo, lo que ocasionó que sufriera quemaduras en el brazo.

Derivado del ataque, ella le pidió que se detuviera y la dejara ir, lo que ocasionó la furia del activo quien le manifestó que no le temía a la cárcel y la golpeó brutalmente, sin que ella opusiera resistencia para evitar que él perdiera aún más el control.

Luego de los golpes, el sujeto tomó el cuchillo con una mano y con la otra a la mujer del cabello, conduciéndola hasta otro cuarto en contra de su voluntad; todo en compañía del menor.

De pronto, sonó el teléfono celular de la pasiva, lo que la hizo responder al llamado, mientras hablaba, el sujeto se molestó más y cuando esta terminó la comunicación, él le gritó y al calor de sus alegatos, tapó la boca tanto de su hijo, como la de la víctima.

Transcurridos algunos minutos, el varón obligó a la pasiva a recostarse en una cama tamaño matrimonial donde le pidió que regresara con él, al tiempo que le ponía el arma blanca a la altura del cuello, además de expresarle que, si recibía una respuesta negativa, la mataría.

Al filo de las 03:00 horas del día 28 de junio, el sujeto tomó un cobertor para protegerse del frío, con el que se cubrió y también a la agraviada; tras causarle varias lesiones, le obligó a sostener relaciones sexuales, indicándole que, de negarse, mataría al hijo que tienen en común.

Lacerada, la víctima buscó a toda costa librarse del ataque sexual y empujó al agresor, lo que hizo que él se molestara más, por lo que tomó el arma punzocortante y la lesionó en la mano izquierda.

Para que se calmaran los ánimos, la ofendida trató de mantener la calma, siendo amedrentada por el hombre, quien le indicó que no intentara salir o se desquitaría con el niño.

Más tarde, alrededor de las 06:00 horas, la mujer retomó el diálogo con su captor para que él mantuviera la calma y la dejara salir junto con su hijo del inmueble, en consecuencia, el sujeto accedió y abrió el portón.

Ella tomó de la mano a su hijo y salió corriendo lo más veloz que pudo, con lo que quedó en libertad, al tiempo que el sujeto le gritó, amenazándola de nueva cuenta con privarla de la vida.

Una vez a salvo, la mujer contó a otros miembros de su familia respecto de la grave situación que experimentó, ellos le auxiliaron para acudir ante la Fiscalía, donde personal especializado atendió su denuncia, canalizándola a la agencia correspondiente.

Fue la Unidad Especializada en Combate al Secuestro donde los servidores públicos que integran la Trilogía de Investigación, se abocaron a la resolución del lamentable suceso, aportando los datos de prueba necesarios que derivaran en el acceso a la justicia para la víctima.

En Investigación Pericial, se realizaron los dictámenes pertinentes en los se concluye científicamente una alta correlación del imputado con los indicios recopilados en la humanidad de la víctima; mientras que Policías de Investigación recabaron actos y registros de investigación para lograr la captura del indiciado.

Tras una serie de operativos, se asestó la captura del señalado dentro de la causa y se le remitió ante la Representación Social para la resolución de su situación legal, que finalmente se llevó a cabo ante el Juzgado de Control y Oralidad, donde el togado determinó vincularle a proceso, estableciendo la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa y el plazo de dos meses para el cierre de la investigación complementaria.